Gracias a la sugerencia de nuestro querido profesor, me acordé de un chiste que me contó mi hermana de 9 años. Para ella es un simple chiste, para nosotros es más bien una manera divertida de jugar con nuestra lengua. Ahí va:
-¿Qué dice una cereza cuando se mira al espejo?
-"¿Serésa yo?"
El denominador común de los chistes con tintes lingüísticos es que suelen ser bastante malos, pero nos sirven. Buen chiste lingüístico.
ResponderEliminar- Por un caminito va caminando un bichito y el nombre ya te lo he dicho.
ResponderEliminar- Oro parece plata no es.
Son adivinanzas jugando un poco con el lenguaje al que a la mayoría nos suena, pero es lo único que se ocurre.