En multitud de contextos cotidianos, los acentos gráficos han pasado a un segundo plano. Entre otras cosas, ésto se puede deber principalmente al uso indebido de redes sociales, ya que resulta más cómodo omitirlas. Pero el verdadero uso indebido de la gramática española llega cuando la omisión de los acentos gráficos da un salto. Este salto se materializa en verdaderas faltas de ortografía de gravedad al aparecer en documentos oficiales.
Un ejemplo de ello puede ser la carta que pasó por todos los diarios españoles, escrita por Esperanza Aguirre y dirigida a los profesores afectados por los recortes en educación. Aquí os dejo el link con la imagen de dicha carta:
http://www.publico.es/espana/394594/aguirre-envia-una-carta-con-faltas-de-ortografia-a-21-000-profesores
En un análisis pausado de las faltas ortográficas cometidas a lo largo de la carta, nos podemos dar cuenta de que los puntos flacos de Aguirre son las mayúsculas en exceso y los acentos en defecto.
Los recortes en educación deberían llegar cuando nuestros políticos sepan que ''más'', indicando cantidad, lleva acento, y que ''curso académico'' no debe de ir en mayúsculas.
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